Seguramente alguna vez escuchaste que no debes comer sandía después de beber en exceso, pero, ¿de dónde salió esta idea? y lo más importante, ¿es verdad?.
Descuida, ya un equipo de expertos se dió a la tarea de desmentir el rumor, particularmente el resultado del estudio fue publicado en el libro: El barman científico: Tratado de alcohología, de Facundo Di Genova, quien en pro de la ciencia y con algunos de sus cuates se metieron un litro de vino, y entre dos y seis porciones de sandía cada uno.
¿Por qué vino?, R=No vine ya estaba aqui…ba dum tss
Dejando el mal chiste de lado, bebieron vino porque el rumor es más viejo de lo que crees, y antes de que te pudieras armar tu roto o kitty chela, es lo que usualmente se bebía.
En fin, después del experimento el grupo concluyó que no hay mayor riesgo con la combinación, sin embargo el texto además limpia el nombre de la sandía y la ubica como afrodisíaco, en combinación claro, con el siempre bien querido alcohol.
Así está el asunto: La sandía, es rica en L-arginina, aminoácido que al ser metabolizado libera óxido nítrico, que actúa como vasodilatador, y que, por ejemplo, en el caso de los hombres favorece las erecciones.
Y bueno ya que uno anda en modo hot, métele alcohol, que es deshinibidor, y es por eso que luego entre compadres se ponen bien quien sabe como.
De todas maneras Di Genova asegura que esto sólo es una hipótesis, y sin embargo, esto ayudaría a explicar la aparición del mito de que la combinación de vino y sandía matan: Digamos que a tu tía la Iglesia eso de la promiscuidad no le late, entonces se inventó eso de la “morición” pa que le bajaras a tu libertinaje.
No se a ti, pero a mi me parece una historia muy creíble.
Pero,adivina qué , siempre sí : ¡existe una forma en que puedas morir por la combinación de estas dos cosas!, pero básicamente necesitarías comer sandía y consumir algún vino no “estabilizado” (lo que sea que eso signifique), lo que produciría una serie de reacciones en tu cuerpo que pondrían en riesgo tu vida.
En resumen, es más fácil que mueras por tomar y manejar, que por beber alcohol y comer sandía, así que ya sabes: si no sabes ni manejar tu vida, no te arriesgues a manejar tomado/a.